Volkswagen se plantea multiplicar por tres, hasta un 10%, su presencia en el mercado ruso. Para empezar el consorcio alemán revisó al alza, de 115.000 a 150.000 unidades, la capacidad de la planta que a primeros de noviembre abrió en la ciudad de Kaluga.
El mercado ruso, junto con los de India y EEUU es muy importante para Volkswagen, explica a Vedomosti el miembro del consejo de directores del consorcio, Jochem Heizmann, responsable de la producción. Dentro de pocos años Volkswagen quisiera dominar un 10% del mercado automovilístico de Rusia, dice el ejecutivo.
La planta de Volkswagen en las inmediaciones de Kaluga fue puesta en explotación en noviembre del año pasado. El precio del proyecto supera 1.000 millones de dólares. En la fase inicial se lanzarán 40.000 coches al año. La planta alcanzará la capacidad proyectada en el horizonte del año 2010.
Los precios de los coches irán bajando a medida de la localización de la producción, afirma Heizmann. El consorcio está negociando con los proveedores de piezas automotrices su instalación en Rusia y estudia la posibilidad de contratar los servicios de los fabricantes de piezas rusos. Volkswagen se plantea el objetivo de fabricar coches en Rusia, utilizando piezas de producción nacional, dice el ejecutivo.
Volkswagen no es el primer consorcio automovilístico que decidió aumentar la capacidad de su planta en Rusia antes de concluir las obras de construcción. Ya el año pasado General Motors resolvió aumentar de 40.000 a 70.000 unidades la capacidad de la planta en San Petersburgo que comenzará a funcionar sólo a finales de 2008. Además, el consorcio norteamericano estudia proceder a una nueva ampliación. Suzuki Motor tenía previsto lanzar en Rusia hasta 30.000 coches al año, pero hace poco anunció que hacia 2012 podría llegar a 100.000 unidades la capacidad de su planta en construcción en San Petersburgo.
Dentro de pocos años el mercado ruso se desvelará como el más grande de Europa y es bien comprensible la estrategia de ampliación por la que optan los consorcios automovilísticos, opina el analista de Kapital, Mijaíl Pak. Aumentar del 3,2% al 10% la presencia en el mercado ruso es un objetivo bastante ambicioso para Volkswagen, sostiene el experto de Ernst & Young, Iván Bónchev. El año pasado AvtoVAZ, General Motors y Ford Motor dominaron respectivamente el 28%, el 11% y el 10,9% del mercado ruso.
Volkswagen puede alcanzar el objetivo propuesto, pero tardará varios años en hacerlo, indica Bónchev. El año pasado se vendieron en Rusia 2,37 millones de coches nuevos y esta cifra seguirá creciendo.
