Moscú, 7 de diciembre, RIA Novosti. Los observadores de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) hicieron una valoración positiva de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Rumania que permitió al actual presidente rumano, Traian Basesku, renovar su mandato, según un comunicado de esta entidad publicado hoy.
La segunda vuelta de los comicios presidenciales tuvo lugar el domingo. Con el 100% de los votos escrutados, Basesku obtuvo un 50,33% de los votos, mientras su rival, ex canciller y líder del opositor Partido Social Demócrata, Mircea Geoana, logró un 49,66%.
Según expertos de la organización europea, la segunda vuelta se celebró "en completa consonancia con los principios de la OSCE y otros estándares internacionales", sin verse afectadas las libertades políticas fundamentales y con una actuación eficaz por parte de los organismos electorales.
No obstante, los observadores insistieron en la importancia de investigar presuntas falsificaciones denunciadas por la oposición, para "fomentar la transparencia y la credibilidad del proceso electoral".
Los social-demócratas denunciaron un "gran número de votos anulados", así como "numerosos casos del llamado turismo electoral" cuando un mismo ciudadano vota varias veces desplazándose de un colegio electoral a otro.
La segunda vuelta fue convocada después de que el pasado 22 de noviembre el actual mandatario rumano, Traian Basesku, ganara los comicios presidenciales con un escaso margen al lograr un 32,44% de los votos frente a un 31,15% obtenido por Geoana.
El jefe de Estado rumano se elige por un período de cinco años, con posibilidad de una reelección como máximo.
Estas elecciones presidenciales han sido las primeras desde la entrada del país en la Unión Europea y sextas desde la caída del régimen comunista en 1989.
