El ex jefe de la compañía Yukos recluido, Mijaíl Jodorkovski, entrevistado la víspera por el diario finlandés Helsingin Sanomat, dijo que no se atreve a predecir el destino político del multimillonario Mijaíl Prójorov dispuesto a postularse como candidato a la presidencia de Rusia en los comicios de marzo próximo.
“Mijaíl Prójorov se percibe hoy día como un proyecto de Putin, aunque eso no le guste. Al realizarse como tal, estaría llamado a garantizarle a Putin la posición centrista. (…) Pero la política siempre resulta ser más complicada que unos esquemas primitivos. Por eso me resisto a predecir el destino de Prójorov. Pueden ocurrir unos cambios imprevistos”, señaló.
Prójorov dijo en una ocasión que de ganar las presidenciales dispondría antes que nada indultar a Jodorkovski. También declaró que no teme correr el mismo destino. Afirmó que no es proyecto de nadie, ni tampoco del Kremlin.
El caso Yukos es uno de los más resonantes en Rusia en los últimos años. Las autoridades acusaron de varios delitos económicos a los dirigentes de esa compañía petrolera, que quedó en bancarrota más tarde y sus haberes fueron adquiridos por la empresa estatal Rosneft.
Jodorkovski dijo dudar que pueda dedicarse a la política al verse en libertad. “La cárcel destruyó en mí al hombre de negocios. Difícilmente podría pensar ahora en categorías de ganancia financiera. Ya tengo otros valores. También cambia nuestro país, transformándose en sociedad ciudadana”, añadió.
En 2005, Jodorkovski y el ex jefe del grupo financiero “Menatep”, Platón Lébedev, fueron sentenciados a ocho años de cárcel cada uno. A finales de 2010, fueron condenados en el segundo proceso a sendos 14 años, por sustracción de 200 millones de toneladas de petróleo y lavado de dinero. Teniendo en consideración la condena anterior y el tiempo pasado en prisión, deberían salir en 2017, pero en mayo pasado un tribunal de segunda instancia les rebajó la condena en un año.
