El presunto autor de las matanzas en Toulouse y Montauban estuvo durante varios años en el punto de mira de la Dirección Central francesa de Información Interior (DCRI), comunicó hoy Claude Gueant, el ministro del Interior de Francia.
“La DCRI y sus agentes en Toulouse lo vigilaron durante varios años pero nada hacía sospechar que estuviera tramando un crimen”, dijo el ministro.
Gueant dirige un operativo para capturar al sospechoso, un hombre de 24 años que se atrincheró en su domicilio de Toulouse.
Supuestamente, es un militante de Al Qaeda que participó en operaciones de la guerrilla islamista en la región fronteriza entre Pakistán y Afganistán y decidió convertirse en 'muyahidín' (combatiente de Dios) para vengar a niños palestinos y castigar a militares franceses por sus intervenciones en el extranjero.
Siete personas murieron en Toulouse y Montauban en los últimos días de las manos de un atacante que se les acercaba en una scooter y disparaba a quemarropa. Primero, mató a tres paracaidistas de origen magrebí en Montauban y causó heridas a un cuarto, negro. Y el pasado lunes, asesinó al rabino en una escuela religiosa judía, a sus hijos de cuatro y cinco años, y a otra pequeña de siete años, hija del director de la escuela.
El presunto asesino llamó esta madrugada a la cadena de televisión France 24 para reivindicar los crímenes perpetrados y proclamar su filiación a Al Qaeda, comunicó a RIA Novosti Nahida Nakad, directora del Servicio Árabe de la cadena.
Especificó las armas que usó en cada casa, dijo cuántos disparos hizo y ofreció otros detalles. También afirmó que actuaba contra la prohibición del velo islámico y la implicación de Francia en la operación aliada en Afganistán.
Anteriormente, una fuente próxima a la investigación identificó al asesino como Mohamed Merah, joven de origen argelino de 24 años.
