La cúpula militar de Corea del Norte anunció los planes de lanzar próximamente una “operación especial” contra el presidente de Corea del Sur, Lee Myung-bak, por presunta profanación de la memoria de los difuntos líderes norcoreanos, informó este lunes el diario Sydney Morning Herald.
“Nuestro ejército revolucionario tomará próximamente unas medidas para atajar las invectivas enemigas”, cita el diario australiano un comunicado de la Agencia Telegráfica Central de Corea del Norte.
Según las informaciones, la operación especial, cuya naturaleza no se revela, irá dirigida contra el prseidente surcoreano, Lee Myung-bak, y sus seguidores, incluidos representantes de la prensa conservadora.
Corea del Norte se mostró ofendida por unas declaraciones del presidente surcoreano que, supuestamente, insultó la memoria de los difuntos líderes norcoreanos, Kim Il-sung y Kim Jong-il, y amenazó con lanzar una “guerra santa” contra el líder del país vecino.
Según la prensa, el pasado viernes, Pyongyang se convirtió en escenario de multitudinarias manifestaciones cuyos participantes coreaban insultos contra Lee Myung-bak y exigían su muerte.
Corea del Sur exige por su parte frenar el vertido de insultos contra su presidente. “Estamos muy preocupados por las crecientes críticas de Corea del Norte contra Corea del Sur que provocan escalada de tensión entre los dos países. Exigimos poner fin a la difusión de declaraciones calumniosas”, declaró un representante del Gobierno surcoreano.
Las relaciones entre las dos Coreas se tensaron nuevamente por el fracasado lanzamiento del satélite norcoreano Kwangmyongsong-3, realizado el pasado 13 de abril. El mandatario surcoreano criticó el lanzamiento al decir que Corea del Norte debería ayudar a su población en vez de gastar 850 millones de dólares en construcción de cohetes.
Al mismo tiempo, muchos países calificaron los planes de Pyongyang de lanzar su propio cohete espacial como violación de los compromisos internacionales del país y las resoluciones 1718 y 1874 del Consejo de Seguridad de la ONU que prohíben que Corea del Norte realice lanzamientos de cohetes con el uso de tecnologías balísticas.
Varios países opinan asimismo que bajo la cobertura del lanzamiento del satélite Pyongyang realizó pruebas de un misil balístico capaz de portar ojiva nuclear. Corea del Norte rechaza las acusaciones y afirma que su programa espacial es totalmente pacífico.
