Algunas reflexiones sobre las inundaciones de Krasnodar

© Gabinete de prensa del Ministerio de Situaciones de Emergencias de Rusia. / Acceder al contenido multimediaLas inundaciones en la región de Krasnodar
Las inundaciones en la región de Krasnodar - Sputnik Mundo
Síguenos en
Las inundaciones en la región de Krasnodar, según datos oficiales del Ministerio del Interior, se han saldado con más de 170 muertos.

Las inundaciones en la región de Krasnodar, según datos oficiales del Ministerio del Interior, se han saldado con más de 170 muertos.

Pero, de una u otra forma, más de la mitad la población de Krimsk, de 50.000 habitantes, ha sufrido la devastación: casas y propiedades destruidas y negocios echados a perder.

El golpe emocional de la tragedia ya ha pasado y ahora empiezan a plantearse múltiples cuestiones. Las mismas que surgieron en Nueva Orleans en 2005, cuando murieron alrededor de 2.000 personas por unas tremendas inundaciones. La ciudad contaba entonces con medio millón de habitantes.

El porcentaje de muertos en la zona de Krimsk es similar al de la ciudad estadounidense. Claro está que estos dos casos no son iguales: en Nueva Orleans la fuerza del agua se llevó por delante un dique, mientras que la ciudad rusa fue arrasada por unas lluvias torrenciales. El elemento en común en estas dos tragedias es el ciclón de críticas que recibieron los gobiernos por su incapacidad para gestionar la situación de emergencia y organizar la evacuación de las zonas afectadas. Pero sobre todo por dejar las ciudades a merced del saqueo durante tres días.

El periodista Vasili Golovnin, residente en Japón, en su blog sobre el sistema local de aviso a la población sobre peligro de tsunamis relata que, junto con los terremotos, son amenazas habituales en aquellas tierras. En cuanto las estaciones meteorológicas automáticas dan la señal de alarma “la información pasa de inmediato a la televisión y a la radio, y además los teléfonos móviles reciben una señal un texto de aviso especial.

Y lo más importante, inmediatamente comienzan a sonar las sirenas, mezcladas con cortos avisos verbales. Este proceso se pone en marcha con los terremotos de intensidad considerable. Por otra parte, es muy difícil no escuchar los avisos, ya que hay torres con altavoces en todas las poblaciones de Japón”.

Y, a pesar de todas estas medidas preventivas, durante el último tsunami importante, provocado por un fuerte terremoto el 11 de marzo del 2011, murieron más de 20.000 personas. El aviso llegó veinte minutos antes del golpe de las olas del mar. Lógicamente, evacuar toda una ciudad en ese espacio de tiempo es imposible.

Es evidente que la Administración Pública de la zona de Krimsk tuvo mucho más de 15 minutos para evacuar la zona y debió haber tomado las medidas necesarias para salvar la mayor cantidad de vidas posible. Aunque sólo hubieran sido unas pocas, el esfuerzo habría merecido la pena.

No obstante, tampoco conviene olvidar la gran diferencia entre la infraestructura y los medios técnicos de los japoneses y los disponibles en la provincia rusa. En cualquier caso, no hubiera sido posible evacuar a toda la ciudad, ni salvar a todo el mundo. Lamentablemente.

LA OPINIÓN DEL AUTOR NO COINCIDE NECESARIAMENTE CON LA DE RIA NOVOSTI

Lo último
0
Para participar en la conversación,
inicie sesión o regístrese.
loader
Chats
Заголовок открываемого материала