Unos 650 rehenes fueron liberados en Argelia y al menos 60 continúan desaparecidos tras una confusa operación militar lanzada por el Ejército argelino en una planta de gas atacada por islamistas, comunicaron hoy fuentes castrenses.
Según las últimas estimaciones, entre los 650 rehenes liberados hay 573 argelinos y unos 70 extranjeros, que son técnicos de EEUU, Francia, Reino Unido, Noruega, Japón, Filipinas y Malasia.
Continúan desaparecidos al menos 60 extranjeros de los 132 capturados por los extremistas, precisó una fuente militar a la agencia local de noticias APS.
Los militares lanzaron la operación en la víspera y siguen 'peinando' el territorio de la planta en búsqueda de islamistas y sus rehenes. En total ya han sido eliminados 18 atacantes.
El ministro de Información de Argelia, Mohamed Said, destacó que en la operación antiterrorista fue rescatado un gran número de rehenes, pero reconoció que entre ellos también hubo muertos y heridos.
En la madrugada del miércoles, más de veinte islamistas vinculados a la red Al Qaeda atacaron una planta de procesamiento de gas situada en la ciudad de Amenas, a 100 kilómetros de la frontera con Libia.
La autoría intelectual del ataque se atribuye a Mokhtar Belmokhtar, un ex militante de Al Qaeda en el Magreb Islámico que fundó un batallón propio, “Firmantes con sangre”.
Después del ataque, los islamistas tomaron rehenes y amenazaron con volar las instalaciones en caso de asalto.
Desde un principio, las autoridades de Argelia se negaron a negociar con los terroristas que, según la prensa, exigieron liberar a sus compañeros encarcelados y poner cese a la intervención militar de Francia en Mali.
La multinacional británica BP, que explotaba la planta de gas en Amenas junto con la noruega Statoil y la argelina Sonatrach, anunció la evacuación de los "trabajadores no esenciales" desde Argelia, según medios internacionales.
