El Ejército de Israel autorizó anoche el restablecimiento de los vuelos civiles en el norte del país, donde el espacio aéreo fue cerrado el domingo pasado ante el aumento de la tensión tras los ataques a Siria atribuidos a la aviación militar israelí.
“El espacio aéreo del norte de Israel cerrado un día antes fue reabierto hoy (lunes)… Las Fuerzas de Defensa de Israel en coordinación con la Dirección de Aviación Civil acordaron autorizar los vuelos en esta zona”, anunció un comunicado del Ejército.
Según estaba previsto inicialmente, el espacio aéreo civil en el norte de Israel permanecería cerrado hasta el próximo jueves. Su reapertura se produjo apenas unas horas después de que el general Yair Golan, jefe del Comando Norte Israelí, descartara el riesgo de un ataque en su área de responsabilidad en la frontera con Siria y Líbano.
Sin confirmar ni desmentir la autoría del bombardeo a instalaciones militares en las afueras de Damasco, las autoridades israelíes se muestran convencidas de que el régimen sirio, debilitado tras dos años de enfrentamientos con la oposición, no emprenderá acciones bélicas contra un enemigo exterior.
En este mismo sentido, el Ejército israelí consideró como “accidental” la caída de dos proyectiles de mortero que ocurrió la víspera en una zona de los Altos del Golán controlada por Israel. El incidente no causó daños personales ni materiales y aparentemente se produjo como consecuencia de los combates entre las fuerzas sirias y las milicias de la oposición. Israel no respondió con fuego y tan solo se limitó a denunciar los hechos ante la misión de paz de la ONU.
Entretanto, un portavoz del Departamento de Estado de EEUU, principal país aliado de Israel, dijo no tener información de que Tel Aviv hubiera notificado a Washington sus planes de atacar a Siria. “No tengo ninguna idea de cómo se enteraron de ello los demás. Puedo decir que yo me enteré por la prensa. No me consta que EEUU fuera informado previamente sobre estas acciones”, afirmó el diplomático estadounidense.
Medios internacionales informaron el pasado fin de semana que el sábado y la madrugada del domingo la aviación israelí lanzó varios ataques contra el territorio sirio. La agencia Reuters citó a una fuente anónima de Inteligencia occidental, según la cual el supuesto bombardeo israelí destruyó un cargamento de misiles iraníes Fateh-110 destinado para el grupo radical libanés Hezbolá.
Por su parte, la agencia siria Sana afirmó que el objetivo de los ataques fue el mismo centro de investigación militar cerca de Damasco ya bombardeado por Israel a finales de enero pasado. La cadena libanesa Al Manar controlada por Hezbolá comunicó a su vez que aviones israelíes bombardearon almacenes de munición, una base de defensa antiaérea y cuarteles del Ejército sirio en Jamraya.
