La ONU desplegó hoy una misión de 'cascos azules' en Malí para hacer frente a extremistas islámicos y separatistas que actúan en el país africano, comunicó la prensa internacional.
El control de las operaciones militares fue asumido por la Misión Integrada de la ONU para la Estabilización en Mali (MINUSMA), que dispone de 11.200 militares y 1.440 policías.
Desde febrero pasado, el control de las operaciones estuvo a cargo de 4.000 efectivos franceses y 6.000 soldados de los países miembros de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (ECOWAS).
Este lunes en Bamako, capital de Malí, tuvo lugar la ceremonia de traspaso del control por parte del contingente de la misión africana en Malí (MISMA). Sus 6.000 combatientes se incorporaron a MINUSMA.
La situación en Malí se agravó tras el derrocamiento de Muamar Gadafi en Libia. Varios grupos extremistas, así como las tribus tuareg que habían gozado del amparo de Gadafi, tras su muerte abandonaron Libia y proclamaron el Estado de Azawad en el norte de Malí, desatando una guerra separatista.
