El presidente de EEUU, Barack Obama, canceló hoy los ejercicios militares conjuntos con Egipto e instó a levantar el estado de emergencia impuesto en el país árabe tras la represión de protestas opositoras que provocaron al menos 525 muertos.
“El ciclo de violencia debe cesar”, subrayó el mandatario estadounidense.
Obama hizo esta declaración desde la isla de Martha's Vineyard, en Massachusetts, donde pasa las vacaciones. En su discurso, Obama anunció que militares estadounidenses no van a participar en la próxima edición de los ejercicios bienales Bright Star con Egipto, prevista para septiembre.
Lamentó el reciente uso de la fuerza contra civiles que, según los datos oficiales, causó al menos 525 muertos y más de 3.700 heridos.
Obama llamó a levantar el estado de emergencia que el presidente interino de Egipto, Adli Mansur, introdujo ayer por el plazo de un mes, y a impulsar un proceso de reconciliación nacional. Aseguró que
EEUU no quiere tomar partido en el conflicto político que se vive en Egipto. “Queremos un Egipto próspero, pacífico y democrático”, aseguró.
Cuando los militares egipcios apartaron del poder al presidente islamista Mohamed Mursi, a principios de julio pasado, EEUU se abstuvo de calificar lo sucedido como golpe de estado, término que obligaría a Washington a parar la ayuda militar de 1.300 millones de dólares anuales que proporciona a El Cairo y a revisar la relación con uno de sus aliados más fuertes en el mundo árabe.
