La República Popular de Lugansk (LPR) pretende crear un Estado de Unión con Rusia, según se desprende de un comunicado publicado hoy en la web de esta entidad autoproclamada en el este de Ucrania.
El documento indica como objetivo “formar un Estado de Unión con Rusia, lo que implica un espacio político, económico y cultural único y un sistema de seguridad común”.
Las relaciones de la RPL con Ucrania y otros países, según el comunicado, se regirán por “acuerdos”.
Las autoridades de la “república popular” permitirán a sus ciudadanos adquirir la nacionalidad rusa y hasta contribuirán a que obtengan pasaportes de Rusia.
En lo económico, pretenden pasar hacia finales de 2015 a la circulación paralela de las monedas ucraniana y rusa, la grivna y el rublo, nacionalizar las empresas pertenecientes a oligarcas de Ucrania, abrir su mercado energético para compañías de Rusia, e ingresar en la Unión Aduanera y la Unión Económica Euroasiática conformada por Bielorrusia, Kazajstán y Rusia.
Varias regiones del este de Ucrania se negaron a reconocer la legitimidad del Gobierno formado en Kiev a finales de febrero pasado, tras la destitución del presidente Víctor Yanukóvich, y respondieron con fuertes protestas a favor de la federalización.
Las provincias de Donetsk y Lugansk se proclamaron “repúblicas populares”, celebraron en mayo referendos de autodeterminación y anunciaron la secesión de Ucrania. En la consulta popular del pasado 11 de mayo, más del 96% de los votantes en Lugansk dijeron “sí” al Acta de Independencia.
El miércoles se supo que la República Popular de Lugansk solicitó reconocimiento a Abjasia, Armenia, Bielorrusia, China, Cuba, Kazajstán, Nicaragua, Osetia del Sur, Rusia, Serbia, Siria, Transnistria y Venezuela, así como a las repúblicas norcaucásicas rusas de Chechenia e Ingushetia.
Mientras, el Gobierno central de Ucrania continúa desde mediados de abril una operación militar contra las milicias independentistas en Lugansk y Donetsk. Rusia insta a cesar de inmediato esta operación “punitiva” que ha provocado numerosas víctimas mortales, en particular, entre civiles.
