EL presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, y el vicepresidente de EEUU, Joseph Biden, acordaron, en una conversación telefónica, coordinar esfuerzos hasta el final del régimen del alto el fuego en el sureste de Ucrania, señala un comunicado publicado hoy en la página web del mandatario ucraniano.
“El presidente de Ucrania y el vicepresidente de EEUU acordaron coordinar esfuerzos en el período que queda hasta el final del régimen del alto el fuego para garantizar la realización del plan de paz”, dice la nota.
El presidente ucraniano habló la víspera con la canciller alemana, Angela Merkel, y la aseguró que la realización del plan de paz en el este de Ucrania requiere una serie de pasos concretos, que comprendan el bloqueo de la frontera con Rusia, el cese de los ataques a los puntos de control, (…) y el envío de una misión de la OSCE”, precisa el comunicado.
A su vez, Merkel aplaudió los esfuerzos de Poroshenko y “expresó su admiración por el coraje (…) de los ucranianos que, a pesar de las pérdidas cuantiosas, buscan la posibilidad de resolver el conflicto por vía pacífica”.
El pasado martes, en la Conferencia anual de la OSCE en Viena sobre la Seguridad, el ministro ucraniano de Asuntos Exteriores, Pavló Klimkin, presentó el plan de paz del presidente Poroshenko.
Según informa la cancillería ucraniana, Klimkin “destacó el papel importante de la OSCE, realizado en particular a través de la Comisión Especial de Control, que contribuye al proceso de la normalización”.
Los países miembros de la OSCE “expresaron su apoyo total” hacia el plan de paz de Poroshenko y subrayaron la necesidad de tomar medidas conjuntas para liberar rehenes, entre los cuales están ocho observadores de la organización.
La semana pasada, el líder ucraniano ordenó el cese del fuego hasta el próximo 27 de junio a todas las fuerzas de seguridad que participan en la operación especial en el este, y presentó un plan de paz para resolver el grave conflicto que vive el país eslavo.
Al mismo tiempo, la noche del martes Poroshenko ordenó a los militares abrir fuego “sin vacilar” ante cualquier violación de la tregua por las milicias independentistas, al tiempo que advirtió de que el armisticio podría ser suspendido antes del plazo previsto.
