El congresista Mario Díaz-Balart ha criticado en la noche del lunes al presidente estadounidense, Barack Obama, por su política hacia Cuba, acusándolo de utilizar un doble rasero y relajar el embargo.
Firme defensor de las sanciones en su versión más cruda, Díaz-Balart es un republicano conocido por favorecer las leyes Helms-Burton.
Invitado por el consejo editorial del periódico Miami Herald, el sobrino de Mirta Díaz-Balart, primera esposa de Fidel Castro, denunció la posibilidad de que Obama alivie la presión sobre Cuba.
Lo que necesitamos es "una política que restrinja el flujo de dinero al régimen (…) Esa ha sido la posición de Estados Unidos, que se reforzó durante los años del presidente Bush, cuando logramos oficialmente destinar un dinero para ayudar a la oposición interna", dijo Díaz-Balart en su alocución al Miami Herald.
A la pregunta sobre si los cubanos, gracias al nuevo clima impuesto por la actual Casa Blanca, son "más libres", replicó que las leyes Helms-Burton deben mantenerse hasta que se inicie una transición hacia la democracia.
Para Díaz-Balart cualquier otra opción, como permitir el turismo estadounidense a Cuba, se presenta baldía. Los turistas, como ya hacen "miles de canadienses y británicos", irán "a Varadero", y sus divisas favorecerán "a los militares", que controlan los centros turísticos.
