Un comprador aprenderá en apenas diez días a diferenciar las copias de los objetos de lujo verdaderos si atiende a un nuevo cursillo que se imparte en Pekín, según la prensa local.
El aprendizaje, que cuesta 32.800 yuanes (unos 5.300 dólares), alterna lecciones teóricas con la práctica. "Una vez finalizado serán capaces de reconocer al menos el 70 % de las falsificaciones en un mercado", ha dicho una profesora apellidada Li al diario Beijing Youth Daily.
Además recibirán como prueba un diploma si superan los exámenes, que no es equiparable al de tasador oficial. El mismo profesor ha explicado que ninguna autoridad china puede ofrecer esa certificación y que, en todo caso, diez días serían escasos.
Li dice haber gastado más de cuatro millones de yuanes en objetos de lujo hasta obtener unos conocimientos sólidos. Para asegurar la enseñanza personalizada, el cursillo sólo aceptará a diez estudiantes. "Esperamos que la gente que se apunte sea sólo la que siente devoción por los objetos de lujo", ha explicado otra profesora.
El sector de lujo aguanta en China cuando la crisis lo ha estrangulado en Occidente. Primeras marcas como Gucci, Prada o Hermès son tozudamente copiadas en tiendas de todo el país y las violaciones de la propiedad intelectual suponen uno de los tradicionales lamentos de las delegaciones occidentales.
Los esfuerzos de Pekín –periódicamente se practican redadas y se destruyen en público los materiales incautados– son necesariamente limitados por los millones de trabajadores que emplea el sector de la copia y la especial sensibilidad nacional: algunos empresarios creen aún que la falsificación es un acto de homenaje al pirateado del que debería sentirse orgulloso.
En el Mercado de la Seda pequinés, tradicional epicentro de la piratería nacional, muchas de las marcas que antes se exhibían han desaparecido de la vista al público, pero no cuesta encontrar a alguien que se ofrezca a acompañarte al taller trasero. En China conviven las copias más chapuceras con falsificaciones que confunden incluso a los profesionales.
