"La 'primavera árabe' y el surgimiento de fuerzas paramilitares radicales musulmanas que practican ejecuciones en plazas públicas no hacen sino demonizar el Islam a ojos de la opinión pública mundial", dijo Kiril reunido con el ministro turco de Asuntos Religiosos, Mehmet Germez.
Según el primer jerarca de la Iglesia Ortodoxa Rusa, la islamofobia y la cristianofobia son fenómenos de la misma naturaleza y sería útil analizarlos juntos.
Kiril expresó su preocupación por los sucesos que se desarrollan en Irak, Siria y otros países donde los extremistas destruyen iglesias y asesinan a cristianos, los convierten en esclavos o los obligan a abrazar la fe musulmana.
El presidente del Consejo de los Mufties de Rusia, Ravil Gainutdin, instó la víspera a los líderes de diferentes confesiones a aunar los esfuerzos para garantizar la supervivencia de las minorías religiosas en el Oriente Próximo, recordando que esta región es la cuna de "las tres religiones abrahámicas" y es inconcebible sin la presencia de los cristianos.