"En cierto modo es una reacción histérica de los talibanes ante las acciones que realizó el Gobierno este verano lanzando una ofensiva contra los terroristas en el noroeste del país", dijo Volhonski a RIA Novosti.
La ofensiva no logró eliminar a todas las milicias sino dispersar a los talibanes, destacó el experto.
El movimiento talibán es una organización terrorista y no se puede negociar con él pero las acciones militares pueden provocar ataques terroristas en cualquier momento, subrayó Volhonski.
Los talibanes irrumpieron en una escuela paramilitar de la ciudad de Peshawar este martes y mataron a tiros al menos a 137 personas, la mayoría de ellos niños.
Los seis extremistas fueron abatidos.
El 15 de junio las Fuerzas Armadas de Pakistán anunciaron una "operación única", llamada Zarb-e-Azb, contra los extremistas talibanes, de Al Qaeda, del Movimiento Islámico de Turquestán Oriental y del Movimiento Islámico de Uzbekistán, que actúan en Waziristán del Norte.
En la operación participan unos 30.000 efectivos paquistaníes.