“La operación provocó la muerte de 27 militantes, también la neutralización de 40 artefactos explosivos colocados en la carretera que conduce a la ciudad”, declaró una fuente anónima al diario iraquí.
Las fuerzas de seguridad acompañadas de voluntarios armados lograron liberar las áreas de Albu-Harin y de Al-Tarisha.
No hubo información sobre muertos o heridos entre los militares.
En junio de 2014 el EI proclamó un califato, que se extiende desde Alepo, en el norte de Siria, hasta la provincia de Diyala, en el este de Irak.
Las posiciones del EI en Irak y Siria son actualmente blanco de los ataques aéreos de una coalición internacional liderada por EEUU.