"La tecnología nos permitirá determinar con antelación cuáles de las carreteras o puentes son los más peligrosos, lo que nos dará la posibilidad de reducir costes y hacer frente a la falta de personal", dijo el vicepresidente de NEC, Katsumi Emura.
El nuevo método, que procesa las imágenes con la ayuda de tecnologías creadas durante el desarrollo de sistemas de reconocimiento facial, detecta grietas o cavidades en las estructuras de hormigón analizando los cambios en las pequeñas vibraciones que se producen al paso de los vehículos.
La empresa, que espera poner en práctica esta tecnología el próximo año fiscal, estima que el costo de revisión de tales estructuras podría reducirse en un 10 por ciento en comparación con los métodos convencionales.