Así lo considera el jefe del Servicio de Inteligencia de Noruega, Kjell Grahdhagen.
"Entre los líderes del EI hay una cantidad considerable de noruegos", expresó Grahdhagen.
Las informaciones obtenidas por Inteligencia indican que muchos islamistas de los más de 150 noruegos que combaten actualmente en Siria e Irak ocupan en la actualidad puestos claves en el EI.
Como ejemplo, el funcionario cita al comandante del EI Bastian Vasques, ciudadano noruego descendiente de chilenos, presuntamente muerto en otoño.
Otro ciudadano noruego, de origen eritreo y cuyo nombre se desconoce hasta el momento, también comanda tropas de esta organización terrorista.
El jefe de la inteligencia noruega Granhagen advierte ante una posible crisis de seguridad en este país, que pudiera concretarse cuando estos "terroristas-viajeros" regresen.
Los terroristas tendrán al regresar no solo la experiencia militar adquirida en las zonas de conflicto, sino también una amplia red de contactos con otros islamistas radicales.
De vuelta a Noruega, los combatientes del EI perfectamente podrán continuar sus actividades terroristas.
Cerca de 5.000 europeos han marchado al Oriente medio para combatir en las filas del EI.
Según Kjell Grandhagen, este fenómeno debe ser abordado como un problema interno de Europa.