Según la policía local, los habitantes fueron trasladados a un centro de evacuación en el municipio de Pikit, provincia de Cotabato del Norte.
En Filipinas el grueso de la población profesa la religión católica, pero el sur es mayoritariamente musulmán y hay un gran número de grupos extremistas, el MILF entre ellos.
En 2012 el Gobierno y los rebeldes sellaron un acuerdo de paz tras 40 años de conflicto que, según varias estimaciones, causó la muerte de más de 150.000 personas. El BIFF, que había formado parte del MILF, se opuso al acuerdo y organizó desde entonces una serie de atentados terroristas.
