"Antes de fin de año dispondremos de cinco submarinos, el sexto se sumará en los próximos años", informó a RIA Novosti un marino que se identificó como "capitán N.", en correspondencia con las exigencias que exigen guardar en secreto los nombres de los oficiales.
Según el entrevistado, se trata de naves de la clase Delfín, fabricadas en Alemania.
Israel cuenta en la actualidad con cuatro submarinos diésel-eléctricos y recibirá este año un quinto, procedente de los astilleros alemanes.
Los nuevos submarinos, según "capitán N." disponen de instalaciones energéticas anaerobias, lo cual significa "que pueden pasar mayor tiempo sumergidos".
Según los medios especializados, tres de los seis submarinos israelíes contarán con este tipo de instalaciones.
La Marina de Israel no planifica continuar ampliando su flota.
"Hablamos en la actualidad de la cantidad que existe", señaló el oficial.
Casi todo lo relacionado con los submarinos israelíes está oculto tras el velo del secreto.
El "capitán N." se negó también a hablar sobre la zona de operación de los submarinos y las misiones que cumplen.