"Hemos rehusado indicar una fecha concreta pero a nivel personal estoy seguro de que el brote del ébola desparecerá hacia finales del verano", dijo en una entrevista a BBC.
Destacó que la ONU cometió varios errores en la lucha contra el virus durante la fase inicial de su propagación, actuando a veces con "arrogancia".
Mientras, la organización Médicos Sin Fronteras advierte que la epidemia del ébola podría repetirse.
La organización teme que en las regiones "donde fue detectada la epidemia, se repita dentro de algún tiempo", declaró precisando que "estaremos más preparados para el siguiente" brote.
La directora Micaela Serafini afirmó que no esperaban una epidemia tan grave y que "los datos cambian cada día", por lo que no tiene sentido "pronosticar cuándo terminará".
"La epidemia continúa y tenemos que concentrar nuestros esfuerzos en monitorear los contactos de los infectados", mencionó.
Al mismo tiempo subrayó que uno de los problemas, que puede causar un nuevo brote, consiste en que es imposible determinar el número exacto de personas con quien ha contactado un enfermo, porque los infectados no quieren o temen revelar esta información.
Otros factores que empeoran la situación en África es que los sistemas de Sanidad en los países más afectados no están bien preparados y que las autoridades de estos Estados rebajan a propósito los datos sobre la epidemia.
El brote actual de ébola comenzó en África Occidental en febrero de 2014 y ha afectado sobre todo a tres países de la región: Guinea, Liberia y Sierra Leona.
Según el último balance de la Organización Mundial de la Salud, el número de muertos por la epidemia supera ya las 10.000 personas de un total de 24.700 casos detectados.
El virus se transmite por sangre, líquidos orgánicos o tejidos de las personas infectadas, aunque también se han registrado casos de contagio por contacto con animales enfermos o cadáveres de los muertos por la infección.
No existe todavía ningún tratamiento específico o vacuna contra la enfermedad.
