La publicación ofrece la supuesta ubicación donde operaría el grupo extremista islámico: a "unos ocho kilómetros de la frontera con EEUU en una zona conocida como Anapra", al oeste de Ciudad Juárez, en el estado mexicano de Chihuahua (noroeste) con frontera con EEUU.
La publicación estadounidense afirma que la fuente de la información es un oficial del Ejército mexicano y un Inspector de la Policía Federal mexicana.
Una fuente de la Procuraduría General de la República (Fiscalía federal) consultada vía telefónica por Sputnik Nóvosti declinó comentar el reporte mientras no se complete el análisis de la información.
El reporte indica que durante el transcurso de una operación conjunta la semana pasada, el Ejército y agentes federales mexicanos habrían descubrierto documentos en árabe y urdu, así como "planos" de Fort Bliss, sede militar de la división blindada del ejército de EEUU.
Los agentes federales mexicanos habrían recuperado alfombras de oración musulmanas con documentos durante la operación, afirma Judicial Watch.
Las supuestas fuentes policiales y de inteligencia citadas por el portal informan que los alrededores de la Colonia Anapra de la fronteriza Juárez estarían bajo dominio del cartel de Juárez y el grupo criminal La Línea, brazo armado de esa mafia, además de Barrio Azteca, una pandilla que habría sido fundada en las cárceles de El Paso, Texas.
La operación de los narcotraficantes en la zona de la colonia Anapra la convertirían en "un entorno operativo extremadamente peligroso y hostil para el Ejército Mexicano y las operaciones de la Policía Federal", dice Judicial Watch citando fuentes mexicanas.
En la zona también operan bandas de traficantes de migrantes ilegales que trabajan para el Cartel de Juárez, quienes ayudarían a los terroristas fundamentalistas a cruzar por el desierto la frontera con Nuevo México, EEUU.
Al este de las ciudades de El Paso, Texas, y Ciudad Juárez, los traficantes de migrantes ilegales también ayudarían a los presuntos militantes extremistas islámicos a cruzar "la porosa frontera entre Acalá y Fort Hancock, Texas".
Los refugios que serían utilizados por los grupos radicales yihadistas son los utilizados antes por los narcotraficantes "a gran escala sin control".
Finalmente, las presuntas fuentes de militares informan que los extremistas tendrían la intención de sabotear ferrocarriles y las instalaciones aeroportuarias en los alrededores del puerto Santa Teresa, Nuevo México, un acceso a EEUU.
Lo extremistas también apuntarían a instalaciones del gobierno en Nuevo México, y las instalaciones de energía eléctrica cerca de Anapra y Chaparral, Nuevo México.
Hasta el momento ninguna de las agencias de seguridad nacional en EEUU ha reaccionado a las informaciones de Judicial Watch, aunque de forma extraoficial sí han negado que el EI disponga de ninguna ibase en México.