"Es preciso celebrar negociaciones lo antes posible porque urge encontrar una solución política (a la crisis en Yemen)", dijo el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, en una rueda de prensa posterior a una sesión de los ministros de Exteriores de los países miembros del Consejo Ártico.
El anterior mediador de la ONU en Yemen, el diplomático marroquí Jamal Benomar, dimitió la semana pasada y abandonó el país, donde la guerra entra en su sexta semana, con Arabia Saudí más decidida que nunca a vencer a los hutíes, los rebeldes chiíes apoyados por Irán.
El miércoles la portavoz de la cancillería iraní, Marzieh Afkham, informó sobre la disposición de Irán de garantizar todas las condiciones necesarias para resolver por vía diplomática la crisis de Yemen, además de instar a todos los países a hacer todo lo que está a su alcance para iniciar el diálogo entre los bandos que participan en el conflicto con el objetivo de poder formar un nuevo Gobierno.
Según organizaciones civiles de Yemen, la operación Tormenta de la Firmeza ha incluido hasta el momento unos 2.450 ataques aéreos, que provocaron la muerte de casi 1.000 personas y afectaron a unos 3.693 civiles, entre ellos cuatro periodistas yemeníes.
Anteriormente se informó de que este jueves los ataques aéreos de la aviación saudí contra objetivos en el territorio de Yemen continuaron, a pesar de haber sido anunciado el fin de la operación.