Los diputados árabes han sido expulsados y fuentes del Parlamento han calificado la sesión de "circo".
Netanyahu ha completado los nombramientos de los titulares de las diferentes carteras más tarde de lo previsto y ha obligado a retrasar la ceremonia de toma de posesión del gabinete.
Dos hombres clave en el Likud, Gilad Erdan y Silvan Shalom, aún no tenían adjudicado ningún ministerio. Los dos aspiraban a ser titular de Exteriores, pero se han llevado una desagradable sorpresa cuando han sabido que Netanyahu había dejado el puesto vacante —de momento lo asumirá él- y se había limitado a nombrar a Tzipi Hotovely como vice-ministra de Exteriores.
Algunos analistas consideran que Netanyahu ha dejado Exteriores vacío por si en el futuro incorpora a su coalición a la Unión Sionista (laboristas y Hatnuah), encabezada por Isaac Herzog. No obstante, el líder laborista ha dejado claro que no se unirá al gabinete de Netanyahu.
"Le aconsejo, señor primer ministro, que no conserve el ministerio de Exteriores, déselo esta noche a un miembro de su partido porque no voy a unirme a su gobierno", ha asegurado Herzog.
Netanyahu ha pactado con La Casa Judía (ultraderecha religiosa), los partidos religiosos ultraortodoxos Shas y Judaísmo Unido de la Torá y Kulanu (Todos Nosotros, centro-derecha).
La Casa Judía ha recibido tres ministerios importantes: Justicia, que encabezará la controvertida Ayelet Shaked, Educación, que dirigirá el líder del partido, Naftali Bennett, y Agricultura, y el líder de Kulanu, Moshe Kahlon, será ministro de Finanzas.
