Así declaró a Sputnik el representante de relaciones públicas de la Organización de Patrimonio Cultural (OPCAPT), Artesanía Popular y Turismo de Irán, Hamid Ziyaiiparvar.
"Palmira es una de las mayores ciudades antiguas de la Tierra, se le puede calificar como cruce de camino de las civilizaciones y las religiones divinas, por lo cual es considerado como patrimonio universal; la toma de esta ciudad por los militantes del grupo EI y el posible vandalismo de los extremistas respecto a los monumentos arquitectónicos y el patrimonio cultural inquietan sobremanera a Irán", señaló el funcionario iraní.
Los militantes del EI tomaron la ciudad siria de Palmira, en la cual hay ruinas antiguas únicas.
Los sucesos de principios de marzo, cuando los terroristas del EI destruyeron esculturas, bajorrelieves y otros tesoros invaluables del Museo de Antigüedades de Mosul, al norte de Irak, hacen temer por el destino de los monumentos de Palmira.
"La República Islámica de Irán no podía quedar indiferente ante la destrucción de los monumentos de la cultura y el arte en los países vecinos de Irán y Siria, por lo cual hace varios meses el vicepresidente de Irán y director de la OPCAPT, Masoud Soltanifar, llevó a cabo conversaciones con la directora general de la UNESCO (Irina Bokova) e informó sobre la total disposición del país a colaborar con el traslado, almacenado y restauración de las piezas dañadas y monumentos de patrimonio histórico cultural de Irak y Siria", recordó Ziyaiiparvar.
Según el funcionario iraní, la carta correspondiente fue enviada también al Ministro de Patrimonio Cultural y Turismo de Irak.
"Irán se considera en el deber de hacer todos los esfuerzos posibles para conservar los valiosos monumentos histórico y culturales de importancia mundial que están a punto de ser destruidos en Irak y Siria", declaró el funcionario iraní.
Por su parte, el viceministro de Cultura de Siria, Jamal al Qayyim, declaró que los yihadistas del EI han robado y destruido ya unos 750 objetos del patrimonio cultural en el país desde el inicio de la crisis.
"Han sufrido cerca de 750 objetos históricos", dijo precisando que "no hay datos exactos, puede ser que el número sea mayor".
Según Qayyim, el objetivo concreto de los terroristas es "arruinar todo lo que nos une con las civilizaciones antiguas y destruir nuestra historia en total".
El vicetitular añadió que la ciudad de Palmira "no es una excepción, bajo la amenaza de destrucción se encuentran los templos construidos durante el Imperio romano".
Qayyim recordó que en todos los lugares, alcanzados por los yihadistas, destruyeron las iglesias y mezquitas antiguas, saquearon los museos y transportaron los objetos de valor fuera de Siria.
"Los terroristas roban los museos y complejos históricos por el dinero, para financiar sus acciones posteriores, así como para destruir las raíces históricas", opinó el viceministro.
Mencionó que la historia está arruinándose bajo los lemas de luchar contra la idolatría que está prohibida en el islam.
Qayyim indicó que cuando Siria era una parte del Califato del Islam, los templos y columnas antiguas fueron conservados.
El profesor de Historia de la Universidad rusa de San Petersburgo, Alexandr Sotnichenko, opina a su vez que los valores históricos y culturales de Palmira pueden venderse online a coleccionistas privados.
"No se puede descartar que los extremistas solo simulen la destrucción de monumentos culturales de inmenso valor, pero en realidad intentarán venderlos a coleccionistas privados en subastas tipo eBay, pues es sabido que el EI cuenta muy bien el dinero", dijo el experto.
Según Sotnichenko, los yihadistas, en un intento de atraer a nuevos partidarios, publicarán en internet escenas de destrucción imitando el proceder el profeta Mahoma, quien al regresar a La Meca destruyó todos los ídolos de la ciudad.
"Es poco probable que la comunidad mundial logre cambiar la situación en el futuro próximo, lo cual sería posible de aceptar Europa y EEUU un diálogo de igual a igual con el régimen de Asad, pero Occidente lo rechaza", dijo el científico.
