Grecia, continúa, "necesita reformas radicales favorables a las fuerzas sociales y en contra de la oligarquía que ha conducido al país a su situación actual".
"Hemos estado luchando duramente durante seis meses, y luchamos hasta el final para conseguir el mejor resultado posible, un acuerdo que permitirá al país volver a recuperarse, y al pueblo griego continuar su lucha", afirma el primer ministro griego.
El Ejecutivo heleno asume "la responsabilidad por la decisión, tomada para prevenir que se implementasen los objetivos más extremos, aquellos favorecidos por las fuerzas conservadoras más extremas de la Unión Europea".
Aunque el acuerdo "exige duras medidas", admite Tsipras, "hemos prevenido la transferencia de propiedad pública al extranjero, hemos prevenido la asfixia económica y el desplome del sistema financiero", un programa que, según el primer ministro griego, "estaba planeado hasta el último detalle" y que había "sido diseñado hasta la perfección y estaba en proceso de ser puesto en obra".
"Finalmente, en esta dura lucha conseguimos obtener la restructuración de la deuda y un proceso de financiación a medio plazo", añade.
Pese a todo, Grecia "continuará luchando, continuaremos luchando para que podamos volver al crecimiento, recuperar nuestra soberanía nacional perdida": "enviamos un mensaje de democracia, un mensaje de dignidad a toda Europa y el mundo; éste es el legado más importante", señala en referencia al referendo del 5 de julio.
Tema: Referéndum en Grecia
"Éramos conscientes de que no era una tarea sencilla, pero hemos creado un legado muy importante" que traerá "el cambio que tanto necesita Europa", escribe Tsipras.
El primer ministro griego agradece a su Ejecutivo el apoyo en una lucha que, cree, "será reivindicada" en el futuro.
"La decisión de hoy mantendrá la estabilidad financiera de Grecia y le proporcionará el potencial para recuperarse", aunque "el acuerdo será difícil de implementar", admite.
Tsipras reconoce que las medidas del acuerdo "crearán inevitablemente tendencias recesionarias", pero se muestra "esperanzado de que el paquete de crecimiento de 35.000 millones de euros que hemos conseguido, la restructuración de la deuda, así como asegurar la financiación para los próximos tres años, creará seguridad en el mercado" y que los inversionistas "se darán cuenta que el miedo a un 'Grexit' (salida de Grecia del euro) es cosa del pasado", aumentando la inversión y poniendo fin a las tendencias recesivas.
"Creo que la mayor parte del pueblo griego apoyará el esfuerzo para volver al crecimiento; que reconocerán que luchamos por una causa justa, que luchamos hasta el final (…) y que las cargas, sean cuales sean, se distribuirán —lo garantizo- con justicia social", declara el mandatario griego.
Agrega que en esta ocasión "quienes evitaron pagar, muchos de ellos protegidos por los Gobiernos anteriores, tendrán que pagar y arrimar el hombro".
"Y este compromiso para este nuevo esfuerzo comienza mañana", concluye la nota.
