La empresa surcoreana afirma que la tecnología elaborada permitirá calcular la cantidad de tejido graso mientras la persona sostiene el móvil en sus manos.
Según se prevé, para ello se colocarán en el teléfono cuatro electrodos, paralelos unos a otro, en varios modelos se encontrarán en la parte trasera del aparato y en otros, en la funda-tapa.
Todavía se desconoce cuándo Samsung Electronics planea introducir esta nueva tecnología.