En este sentido, el subsecretario general del Ministerio de Exteriores de Brasil, Antonio Simoes, explicó este martes en rueda de prensa en Brasilia que "posiblemente habrá una novedad en relación a Bolivia en esta Cumbre" y añadió que los países miembros "avanzarán para conseguir un acuerdo en relación al protocolo de su adhesión al bloque", una posibilidad que se discute desde 2011.
Ya en el caso de Ecuador, Simoes aclaró que "habrá que aguardar algún tipo de indicación para ver lo que realmente desea", mientras que en el caso de Venezuela, país que atraviesa mayores dificultades económicas dentro del bloque, el representante brasileño quiso ser muy explícito al asegurar que "es un miembro pleno".
En declaraciones a Sputnik Nóvosti, la economista del Instituto Brasileño de Economía (IBRE), Lia Valls Pereira, opinó que la integración de Bolivia y Ecuador en Mercosur "podría funcionar como un aliciente para reactivar las economías del bloque" y servir como "un paso más hacia la definitiva integración de los países de América Latina, especialmente en la cuestión aduanera".
Sin embargo, la experta avisó que, desde el punto de vista de los intereses de Brasil,"la entrada de Bolivia es muy problemática debido a su posición contraria a cualquier tipo de acuerdo de libre comercio con la Unión Europea" y añadió que la incorporación del país andino "podría suponer un conflicto del bloque con Chile debido a sus pretensiones de obtener una salida al Pacífico".
Precisamente, el título de esta 48ª Cumbre Mercosur, "Avanzar con Mercosur con más Integración, más Derechos y más Participación", supondrá el fin de la presidencia temporal en el bloque de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, que será relevada por el presidente de Paraguay, Horacio Cortes, quien ocupará ese cargo durante la próxima cumbre dentro de seis meses.