El mandatario aseguró en rueda de prensa que 66% de los montos provendrán de fondos públicos, que no se tocarán las reservas internacionales y que la inversión será una "extraordinaria" fuente de empleo decente.
El sector de la energía recibirá el monto mayor, 4.230 millones de dólares, de los cuales 1.740 millones corresponderán a contratos llave en mano para el desarrollo de fuentes eólica, solar y de biomasa y el resto se distribuirá entre inversiones de las empresas públicas de electricidad y de petróleo, de una planta regasificadora que se está construyendo y en la mejora de las líneas de transmisión.
Además, se destinarán 360 millones de dólares para la red ferroviaria, la mayor parte (200 millones) procedentes de los Fondos de Convergencia Estructural del Mercosur, creados para dar respuesta a las asimetrías entre países grandes y pequeños del bloque (Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela).
Habrá asimismo 200 millones de dólares para el desarrollo del interior, dijo Vázquez en una presentación ante los medios de comunicación junto a todo su gabinete presidencial.
El mandatario también se refirió a dos proyectos emblemáticos del anterior gobierno de José Mujica que en los últimos meses parecían descartados por la administración Vázquez y que no están incluidos en este paquete de inversiones.
Se trata de un puerto de aguas profundas y un estadio y complejo cultural conocido como Antel Arena, por el nombre de la empresa telefónica estatal que lo concibió.
"El Antel Arena… se construirá en este período de gobierno" y para el puerto "tenemos una propuesta en estudio" que, cuando esté "fundamentada seriamente, la haremos conocer", dijo Vázquez.
Los anuncios presidenciales de abultadas inversiones aparecen mientras el gobierno prepara su presupuesto quinquenal con insistentes mensajes de prudencia en los gastos, señales de desaceleración de la economía y un panorama complejo para las economías de los países de América Latina.
