El anciano fue encontrado ahorcado; un día antes de morir, telefoneó a su nuera Mieko y le dijo que no quería evacuarse y que, probablemente, "ya había vivido demasiado".
"Quiero que comprendan la gravedad de lo ocurrido: una persona que vivió hasta los 102 años eligió suicidarse", declaró Mieko Okubo en una rueda de prensa este miércoles.
"Queremos que conozcan el dolor que tuvimos que sentir sus familiares, y tenemos la intención de aprovechar esta posibilidad para explicar nuestros sentimientos", agregó.
El accidente de Fukushima, ocurrido en marzo de 2011 y provocado por un fuerte terremoto y tsunami, se convirtió en el peor desastre de este tipo desde la catástrofe de Chernóbil en 1986.
Las fugas radiactivas obligaron a evacuar a más de 81.000 personas de los alrededores de la central nuclear; el Ejecutivo nipón prometió que todos los afectados serían indemnizados por la operadora de la planta.
Para finales del pasado mayo, TEPCO había pagado casi 40.360 millones de dólares de estas indemnizaciones.