"Hemos definido las medidas prioritarias que la Misión abordará con sus jefes y nosotros también no prepararemos para su implementación", dijo.
Lo primero, agregó, es "comprobar el retiro de las armas del calibro superior de 120 mm".
"Es muy importante asegurar que sean registrados los ataques nocturnos (…) con participación de los representantes del Centro Conjunto de Control y Coordinación y la OSCE", señaló.
Los observadores, dijo, no lo pueden hacer debido a las limitaciones de su mandato.
"Y después hay que intensificar los preparativos y la firma inmediata del documento para retirar las armas del calibro menor de 100 mm", concluyó.
Kiev lanzó en abril de 2014 una operación militar en las provincias de Donetsk y Lugansk, en el este de Ucrania, para ahogar los focos de indignación por el cambio de poder violento en el país en febrero de ese mismo año.
El pasado 12 de febrero, el Grupo de Contacto Trilateral (Rusia, Ucrania y la OSCE) aprobó en Minsk un conjunto de medidas para la aplicación de los Acuerdos de Minsk para el arreglo de la crisis que prevé un alto el fuego, la retirada de las armas pesadas y el inicio de un proceso político entre Kiev y las milicias.
El pasado 21 de julio el Grupo de Contacto Trilateral sobre el arreglo en Ucrania alcanzó en Minsk un acuerdo sobre la retirada de carros de combate y armas de menos de 100 milímetros de la línea de separación en Donbás.
