"Nuestra tarea consiste en plantar anualmente un mínimo de 10.000 hectáreas de viñedos, para incrementar la superficie de estos hasta las 140.000 hectáreas para 2020", señaló Tkachov en una entrevista publicada en el periódico ruso Komsomolskaya Pravda.
El titular de Agricultura añadió que "estas medidas conducirán a una reducción por etapas de las importaciones en el transcurso de cinco a siete años".
En la actualidad, en Rusia están plantadas 87.000 hectáreas de vid.
Según el ministro de Agricultura, su entidad "está lista a multiplicar los subsidios para la siembra y cuidado de los viñedos y para estimular la producción de vinos en pequeñas empresas vinicultoras".
Además, Tkachov añadió que "a partir de este año damos la oportunidad a los vinicultores a recibir créditos preferenciales para la construcción y modernización de sus empresas, así como para la compra de equipamiento".
Anteriormente el titular se pronunció por la prohibición de suministro a Rusia de materia prima extranjera para la fabricación de vino, señalando que en su opinión, no siempre se importa la materia prima de mayor calidad.