Las fuerzas israelíes irrumpieron en la Explanada, que los musulmanes denominan el Noble Santuario y los judíos, el Monte del Templo, y dispararon granadas de aturdimiento y balas de goma contra fieles musulmanes congregados en el recinto, según diversos testigos citados por la agencia palestina Maan.
Según varios testigos, grupos de israelíes de extrema derecha se congregaron cerca de una de las puertas de acceso a la Explanada e instaron a sus seguidores a rezar en el recinto cuando empiece la fiesta de los Tabernáculos.
Los no musulmanes pueden visitar el complejo de la Explanada pero no rezar allí en virtud de un acuerdo entre Israel, Jordania y las autoridades religiosas locales. La Explanada se encuentra en la ciudad vieja de Jerusalén, situada en la parte este de la ciudad, la zona palestina ocupada por Israel desde 1967 y anexionada en 1980.
Las autoridades palestinas manifestaron su “preocupación” respecto a la posibilidad de que los israelíes intenten establecer en el recinto un horario de rezo para los judíos. No obstante, el gobierno israelí aseguró que no tenía intención de cambiar el statu quo del complejo donde se encuentra la mezquita de Al Aqsa y donde los judíos creen que se situaban sus dos templos destruidos.