La Abogacía del Estado ha solicitado una pena de 22 meses y medio para el futbolista por tres delitos contra la Hacienda pública entre 2007 y 2009 y una multa de 4,1 millones de euros; mientras que la Fiscalía considera que fue el padre del astro argentino el que organizó el entramado societario, y no imputa a Messi.
Según el futbolista, la Fiscalía "razona ampliamente los motivos que deben llevar a no acusar a Messi por delito fiscal".
Ante esta situación, destacan en el comunicado que "el escrito de la Abogacía del Estado fue presentado el 8 de julio, mientras que el del Fiscal es de fecha posterior, el 25 de septiembre". Sin embargo, ayer la Abogacía se reafirmó en sus acusaciones.
Messi también considera que la Fiscalía es "el órgano de relevancia constitucional integrado con autonomía funcional en el Poder Judicial", mientras que la Abogacía del estado "solo representa los intereses de la Agencia Tributaria".
No obstante, el jugador destaca que la pena que solicita la Abogacía "no implica cumplimiento efectivo", dado que el mínimo para entrar a prisión en España sin antecedentes son 24 meses y un día.
Messi tendrá que sentarse en el banquillo de los acusados cuando se celebre el juicio.
El Barça arropa a "La Pulga"
El Fútbol Club Barcelona también emitió un comunicado en el muestra todo su apoyo a Messi en su conflicto judicial por supuesto fraude fiscal.
El club hace llegar a través de esta nota oficial "todo su afecto y solidaridad" hacia el delantero y su familia, además de proporcionarle "todo el apoyo y ayuda en el ámbito jurídico, fiscal y administrativo a la familia en este proceso".
En el comunicado, el club catalán muestra su "extrañeza" por la divergencia de criterios entre la Fiscalía y la Abogacía del Estado, dado que el primero decidió no acusar a Messi y el segundo "dice justo lo contrario".
La Abogacía del Estado ha solicitado una pena de 22 meses y medio para el futbolista por tres delitos contra la Hacienda pública entre 2007 y 2009 y una multa de 4,1 millones de euros; mientras que la Fiscalía considera que fue el padre del astro argentino el que organizó el entramado societario, y no imputa a Messi.
El FC Barcelona vuelve a insistir en la carta en lo que considera "una campaña" en contra del club, como ya dijo tras las imputaciones de su presidente y expresidente por el caso Neymar.
Denuncia "el cúmulo de decisiones externas, totalmente inadmisibles y que hace tiempo ya comenzaron", según ellos, siempre "ajenas al ámbito estrictamente deportivo", que tienen además consecuencias en los propios jugadores.
Estas decisiones "perjudican la buena marcha del club, su estabilidad y la de los deportistas", por lo que el club anuncia que "se propone trabajar con más firmeza que nunca para defender sus legítimos derechos y está preparado para los nuevos desafíos que puedan llegar".