Grushkó señaló que sobre este tipo de informaciones "no vale la pena ni hablar en serio".
Según el diplomático, "de modo evidente la amenaza real a todo el espacio euroatlántico, del cual no excluyo a Rusia, se desplazó al sur".
Con la excusa de la supuesta amenaza rusa, la OTAN tiene previsto ampliar su presencia en Europa del Este. Los ministros de Defensa de los países miembros de la Alianza decidieron crear unidades de integración en Hungría y Eslovaquia, según declaró este jueves su secretario general, Jens Stoltenberg.
Anteriormente este tipo de centros de comandancia fueron abiertos en Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, Bulgaria y Rumanía.
Cada una de estas oficinas cuenta con unas cuarenta personas, aproximadamente.
Además, los ministros de Defensa de los países de la OTAN aprobaron la concepción militar de las Fuerzas de Reacción de la Alianza, que por decisión previa se incrementarán hasta 40.000 efectivos e incluirá los componentes aéreo y naval.
Rusia no cooperará con la OTAN
"Dado que la OTAN ha declarado que no tiene ningún papel en Siria, no hay razones para considerar la perspectiva de cualquier cooperación con la Alianza como organización en la lucha contra el Estado Islámico", dijo.
Al mismo tiempo destacó que Rusia está lista a cooperar con la Alianza en esta dirección pero parte de que la colaboración debe desarrollarse sobre la base de las relaciones bilaterales teniendo en cuenta la influencia que tiene la OTAN no solo en Siria, sino en Oriente Próximo y África del Norte.
El diplomático ruso denunció también la intensificación de los vuelos de reconocimiento de la Alianza, sobre todo en los mares Báltico y Negro.
"Es un escenario muy peligroso que deteriora la seguridad europea y la seguridad de los propios miembros de la OTAN", dijo.
El jueves Gran Bretaña, miembro de la alianza noratlántica, anunció el envío de un contingente militar a las naciones bálticas alegando "una posible agresión rusa".