"No podemos acoger más refugiados en Europa, no es posible", dijo en una entrevista con varios diarios europeos, entre ellos el Süddeutsche Zeitung.
En opinión del jefe de Gobierno francés, en lugar de permitir la llegada de miles de refugiados e inmigrantes a la Unión Europea, lo que dificulta los controles durante su registro, Bruselas debería encontrar una solución con los Estados vecinos de Siria, como Turquía, el Líbano y Jordania.
"De lo contrario, se cuestionará la capacidad de Europa de controlar sus fronteras de manera efectiva", afirma Valls, quien mantiene que, de no adoptar medidas urgentes, aumentará el euroescepticismo entre la ciudadanía de los Estados miembros.
Según los últimos datos de la agencia europea para la gestión de las fronteras, Frontex, cerca de 1,2 millones de inmigrantes llegaron a la UE en los primeros 10 meses de 2015.
La Comisión Europea ha calificado la actual crisis migratoria como la peor desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.
