"Si en La Meca o Medina se descubre que los peregrinos no están hospedados en apartamentos habitables, el Ministerio los ubicará en uno de los hoteles que tengan habitaciones libres y descontará los gastos de las garantías bancarias de las compañías", reza la declaración del Ministerio citada por el medio de prensa.
La entidad enumeró una serie de exigencias a los operadores hajj, fijando las normas que estos deberán cumplir.
Las compañías también están obligadas a disponer de una serie de licencias del Ministerio Hajj y de la Dirección de Defensa Civil del Reino.
"En caso de que estas condiciones sean violadas las compañías serán castigadas, incluso con la pérdida del permiso de operar", señala el comunicado.
A finales de septiembre tuvo lugar una estampida en el valle de Mina, cerca de La Meca, que provocó al menos 717 muertos y 863 heridos.
Dos grandes flujos de peregrinos musulmanes que efectuaban el hajj chocaron entre sí en la confluencia de dos calles.
El hajj es el quinto de los llamados pilares del islam, todo musulmán debe peregrinar al menos una vez en la vida a la ciudad de La Meca, siempre y cuando tenga los medios económicos y las condiciones de salud necesarias.