La portavoz del Pentágono, Michelle Baldanza, precisó a RIA Novosti que el incidente se produjo el pasado 25 de enero.
"La aeronave de EEUU RC-135U se encontraba realizando un vuelo de rutina en el espacio aéreo internacional sobre el mar Negro, cuando fue interceptado por un Su-27 ruso de una manera peligrosa", señaló Baldanza.
En el Pentágono comunicaron anteriormente que los militares de los dos países analizaron temas de seguridad durante los vuelos en Siria, en consonancia con un memorando suscrito previamente.
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A este respecto la portavoz constató que las consultas no estaban vinculadas a ningún caso concreto.
