Cabe recordar que el gasoducto Bolivia-Brasil, que proporciona actualmente 31,5 millones de metros cúbicos de gas natural a diario a Brasil, es una circunstancia que el Gobierno de Morales está muy interesado en aprovechar mediante una aceleración de las prospecciones en los campos de San Alberto, Sabalo y Margarita, aunque recientemente el bajo precio del petróleo y el gas natural ha obligado a la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) a recortar sus planes de inversiones y por tanto de suministro al país vecino.
Además Rousseff apoyó la construcción del Corredor Ferroviario Bioceánico Central que busca unir el Atlántico y el Pacífico. "Abordamos y definimos el estudio y evaluación financiera del proyecto del corredor bioceánico central, proyecto complementario al transcontinental", informó Rousseff. El corredor del tren se extenderá por 3.360 kilómetros de vías, de las que 1.600 kilómetros ya estarían construidas en suelo boliviano.
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Por último, Rousseff quiso felicitar al presidente boliviano por los "grandes avances sociales y económicos por los cuales Bolivia ha pasado en lo últimos años" y subrayó que "el excelente desempeñó de la economía" del país vecino "le permitirá ejercer un papel cada vez más importante en América Latina".
