Pekín (Sputnik). — La Comisión Nacional de Control de Narcóticos de China (NNCC, por sus siglas en inglés) ha informado de que, además de la droga incautada, también los sospechosos detenidos por delitos relacionados han subido hasta los 194.000, un aumento del 15 por ciento.
El conocido como Triángulo de Oro del sudeste asiático es el principal surtidor de la droga en el país.
El 90 por ciento de las casi 9 toneladas de heroína y 12 toneladas de metanfetamina interceptadas proviene de esa zona formada por Myanmar, Laos y Tailandia.
En el Triángulo de Oro existen unas 46.700 hectáreas de campos para el cultivo de la amapola con capacidad para producir 600 toneladas de opio y 60 de heroína anuales.
Otro zona de donde llega la droga a China es la formada por Afganistán, Irán y Pakistán.
La policía detuvo el pasado año a casi 2.000 extranjeros, provenientes de 39 países.
Pero aunque el grueso de la droga proviene del sudeste asiático, la mayoría de detenidos de fuera de China son africanos.
Algunos sospechosos de África son más difíciles de controlar porque utilizan extraños dialectos y jergas que requieren de traductor, ha explicado la prensa china.
En las calles de Sanlitun, el barrio más occidentalizado de Pekín, no es raro que los africanos ofrezcan drogas a los paseantes a plena luz del día.
China ha ejecutado a docenas de extranjeros en los últimos años por tráfico de droga, aunque las cifras exactas no son públicas.
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La ley estipula la sentencia de muerte a quienes comercian, transportan o producen más de un kilo de opio o 50 gramos de heroína o metanfetamina, según el diario China Daily.
Mao consiguió erradicar casi por completo las drogas del país, pero la apertura económica las ha devuelto especialmente entre las clases jóvenes urbanas.
