“Seguimos muy de cerca los avances positivos que, de la mano del Papa Francisco, han permitido abrir las puertas a la esperanza y al diálogo entre el pueblo de Cuba y de Estados Unidos”, comienza la misiva, señalando que “queda un largo camino a recorrer hasta lograr el levantamiento del bloqueo y el cierre de la base militar que tu país mantiene en Guantánamo, donde se violan los derechos humanos de los prisioneros, sin juicios y sin posibilidades de alcanzar la libertad”.
“Es importante que sepas que no vienes a la Argentina en cualquier momento. En 1976, mientras tu tenías tan solo 14 años y tu país festejaba dos siglos de su independencia, nosotros comenzábamos el período más trágico de nuestra historia, con la instauración de un terrorismo de estado que sometió a nuestro pueblo a la persecución, la tortura, la muerte y las desapariciones para quitarle su derecho a la libertad, independencia y la soberanía”, dice.
“Te escribo como sobreviviente de ese horror que, como muchos otros, fuimos víctimas de persecución, cárcel y torturas por defender los derechos humanos frente a las dictaduras latinoamericanas que impusieron la Doctrina de la Seguridad Nacional y de la “Operación Cóndor”, con el financiamiento, adoctrinamiento y coordinación de Estados Unidos. Fue por esa lucha colectiva que me otorgaron el Premio Nobel de la Paz y lo asumí en nombre de los pueblos de América Latina”, agrega.
El Premio Nobel argentino recuerda a Obama que Estados Unidos “formaba a las Fuerzas Armadas latinoamericanas en la Escuela de las Américas (SOA) en tácticas de tortura y secuestros” y “promovía con elites locales, políticas neoliberales que destruyeron la capacidad productiva del país e impusieron una deuda externa ilegal e ilegítima”.
“Tu vendrás a mi país en el Día Nacional de la Memoria, por la Verdad y la Justicia, el mismo día en que se cumplen 40 años de la última dictadura genocida de Argentina, y en el año en que se cumplen 200 años de nuestra independencia nacional. Ciertamente no puedes desconocer que tu país tiene muchas deudas pendientes con el nuestro y con muchos otros”, señala.
Pérez Esquivel termina su carta diciéndole a Obama que, si su intención no es “anunciar ninguna de estas reparaciones, ni de evitar nuevos padecimientos, lamentablemente tú visita será advertida por la mayor parte del pueblo argentino como un gesto de provocación hacia uno de los ejes centrales de nuestra identidad nacional: la defensa de los derechos humanos y de los pueblos. Por eso, si no decides posponer tu visita para otra fecha, podrás escuchar lo que el pueblo Argentino tiene para decir al mundo”.