El movimiento radical pone como condición previa de las negociaciones la retirada de las tropas extranjeras del país y la puesta en libertad de sus integrantes encarcelados, recordó Kabúlov, quien dirige el Segundo Departamento para Asia de la Cancillería rusa.
Por ello, su negativa fue "esperada", dijo.
"De ahí que sea imposible hablar de un proceso de negociación serio con los talibán", lamentó.
La cúpula talibán anunció el pasado día 5 su rechazo a reanudar las negociaciones de paz con el Gobierno afgano.
Con anterioridad, las partes habían alcanzado un preacuerdo para celebrar la primera ronda del diálogo directo en la primera mitad de marzo en la capital pakistaní, Islamabad.
La situación en Afganistán empeoró drásticamente en los últimos meses.
Los radicales del movimiento Talibán, que habían ocupado una gran parte de las zonas rurales del país, lanzaron una ofensiva contra grandes ciudades.