Una mujer vestida con niqab grabó un video en el que pide al Gobierno iraquí y a los países vecinos que intervengan lo antes posible en Faluya y pongan fin al genocidio de hambre al que ha sido sometida la población local por parte de Daesh, organización terrorista proscrita en Rusia y otros países.
سيدة من داخل #الفلوجة تطالب الحكومة بتخليصهم من #داعش او ضربه…سيدة من داخل #الفلوجة تطالب الحكومة بتخليصهم من #داعش او ضربهم بالكمياوي حتى يموتون السكان بالكمياوي بدل ان يقتلهم الجوع و يرتاح منه.
Posted by اصوات العراق on jueves, 31 de marzo de 2016
En el vídeo, la residente de la ciudad está señalando con el dedo una estufa improvisada de ladrillos y madera para cocinar al aire libre. Se queja de que la población ingrese en el hospital porque desayuna, almuerza y cena guisantes no aptos para el consumo humano.
"Así vivimos en Faluya. Nos estamos muriendo de hambre. Los países árabes, como Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos, así como Estados Unidos y otros países no piensan en nosotros, en la población de Faluya. Aquí no hay comida, ni agua, ni medicinas. La gente está muriendo. Los hospitales están repletos de pacientes, porque las personas no tienen comida adecuada, ni agua limpia, ni medicamentos para el tratamiento", grita la mujer en el vídeo.
La residente de la ciudad iraquí se queja de los precios inaccesibles de los productos: un cartón de leche cuesta 4 dólares y un paquete de dátiles agusanados, no aptos para el consumo ni tan siquiera de los animales, vale 10 dólares.
"¿Cuándo nos van a salvar de eso ya? ¡No podemos aguantarlo más! ¡El hambre ha acabado con todos, y a muchas mujeres les han obligado a tirar a sus hijos al río!", pasa al llanto histérico y gritos.
Una vez publicado el vídeo en las redes sociales, los combatientes de Daesh empezaron a allanar las casas de Faluya y arrebatar a todos aquellos que pudieran estar involucrados en la publicación del vídeo.
El video causó una tormenta de indignación entre los residentes de la ciudad y de otros pueblos. Sus comentarios llaman a una guerra más activa y eficaz contra Daesh para liberar a la gente de la opresión terrorista.
No es la primera vez que Daesh trata de suprimir un levantamiento contra el "hambre" en Faluya, resultado de destinar la mayoría de los alimentos para las necesidades de los militantes invasores. Anteriormente, el 28 de marzo, las mujeres iraquíes salieron a las calles de Faluya para protestar contra el hambre, con la que los terroristas torturan a la gente hasta la muerte. Durante aquel acto los manifestantes lanzaron piedras contra los militantes, haciendo que algunos de ellos quedaran gravemente heridos.