DAMASCO (Sputnik) — Explicó que las agrupaciones terroristas fueron expulsados de Yalda ya en 2014, pero en el lugar quedaron los milicianos locales que rechazaron entregar armas y negociar con los representantes de las autoridades.
“La Federación Rusa nos ayudó mucho, ha sido el garante de observación de la tregua y del régimen del cese del fuego”, dijo.
Desde marzo de 2011, Siria está sumida en una guerra civil en la que las fuerzas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición, entre ellos organizaciones extremistas como Daesh (autodenominado Estado Islámico) y el Frente al Nusra, proscritas en Rusia y varios países más.
Desde el 27 de febrero en Siria rige un alto el fuego, según lo acordaron EEUU y Rusia en una declaración conjunta.
La tregua, avalada por una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, no se aplica a los grupos declarados terroristas por la ONU, incluidos Daesh y el Frente al Nusra.