"Hemos conseguido con la banca japonesa 1.500 millones de dólares, fresquitos, para este proyecto", dijo Maduro en un acto televisado desde las instalaciones de la refinería, la noche del jueves.
Su ministro de Petróleo, Eulogio del Pino, indicó que el dinero japonés es parte de un financiamiento por 5.300 millones de dólares para la ampliación de la refinería e incluye participación de fondos chinos y coreanos.
En total, se trata de un proyecto por 8.800 millones de dólares para incrementar en 180.000 barriles diarios la producción de derivados a partir de los crudos pesados y extrapesados de la Faja Petrolífera del Orinoco, del sureste venezolano, dijo Maduro.
Del Pino añadió que al financiamiento externo corresponderá un aporte de la corporación estatal Petróleos de Venezuela pero no con dinero sino con aumento de la producción.
En la ampliación de la refinería, ya desarrollada en un 44 por ciento, laboran unos 6.000 trabajadores y la cifra se duplicará para culminar las obras a más tardar en los primeros meses de 2018, dijo Del Pino.
La refinería de Puerto La Cruz, que data de 1950, se amplió el año 2000 para destilar hasta 200.000 barriles (de 159 litros) por jornada. Venezuela, que produce 2,6 millones de barriles diarios, tiene en su noroeste un complejo de refinerías capaz de procesar un millón de barriles por día.
