"Esperamos que en el futuro podamos reconstruir no solo este monumento arquitectónico (Palmira), sino también otros monumentos demolidos por esta fuerza destructiva de los siglos XX y XXI", declaró el delegado permanente de Serbia ante la organización, Darko Tanaskovic, durante la visita.
Horas antes, RIA Novosti reportó que una delegación de la Unesco llegó a Palmira para debatir con las autoridades sirias y expertos rusos la reconstrucción del patrimonio cultural reducido a escombros por Daesh, proscrito en Rusia y otros países.
Según las primeras estimaciones, se conservó un 80 por ciento de la parte histórica de Palmira.
Los terroristas dinamitaron el Arco del Triunfo, los templos de Bel y Baalshamin, así como columnas funerarias y viales.
También resultaron dañados la Ciudadela de Saladino y el Museo Nacional, que perdió muchas de sus piezas.
El 27 de marzo el Ejército sirio y el grupo Halcones del Desierto recuperaron el control de Palmira, uno de los seis lugares de Siria declarados Patrimonio de la Humanidad por Unesco.
Desde mediados de mayo de 2015, la antigua ciudad había permanecido en manos del autoproclamado Estado Islámico, o Daesh, organización terrorista proscrita en Rusia y otros países.
Se estima que la reconstrucción de la ciudad puede llevar unos cinco años.