EEUU es el menor donante de la cadena ucraniana mientras que las agencias respaldadas por los Gobiernos europeos y canadienses son los principales patrocinadores, según el periodista.
"Cabe destacar que el mayor financiamiento procede de la Comisión Europea. Es un hecho peculiar, dado el carácter antirruso del contenido de Hromadske", señala el autor.
Fundado por Roman Skrypin, un periodista ucraniano, a inicios de la Revolución de Maidán —la cual culminó con el golpe de estado en 2014—, la cadena se convirtió en una plataforma de noticias presentadas desde el punto de vista de varios analistas, la mayoría de los cuales expresan opiniones proccidentales.
La cadena se especializa en los artículos sobre "los planes del mandatario ruso Vladímir Putin en Ucrania", "la amenaza rusa para los países bálticos" —uno de los temas preferidos de Hillary Clinton y la OTAN— y la supuesta "opresión de los tártaros de Crimea por las autoridades rusas", enumera el periodista.
Aunque Occidente siempre muestra recelos por "el impacto de la televisión rusa en la opinión pública en Ucrania y en el extranjero", las fuentes de ingresos de Hromadske TV muestran que EEUU y sus aliados no quedan rezagados en invertir en propaganda para su propia agenda.
Atacar a Rusia resultó una buena estrategia para lanzar un proyecto mediático rentable en Ucrania. "Sé un antirruso total, y los gobiernos norteamericanos y europeos te darán plata", ironiza Rapoza.
