Un informe del Instituto de Investigación Hurun, que elabora listados de millonarios, señala que las fortunas chinas son las que más han crecido en los últimos diez años.
Según Rupert Hoogewerf, empresario británico al frente del grupo, la tendencia indica que la mayor fortuna del mundo será de un chino en apenas cinco años.
Otra conclusión del informe mostraba el perfil cambiante de los millonarios chinos frente al inmovilismo de los estadounidenses: mientras los integrantes de éste apenas han cambiado en los últimos años, una docena han adquirido el estatus en el gigante asiático en los últimos 17 años.
Hoogewerf también prevé cambios próximos en los puestos más altos en China.
Los otros rivales de Wang citados por el experto también están en el mundo de la tecnología, lo que revela el cambio del patrón productivo: Pony Ma, fundador de la compañía de comunicaciones por internet Tencent, y Lei Jun, fundador del fabricante de telefonía Xiaomi.
El doloroso contrapunto a la presencia de chinos en las listas de millonarios del mundo es la creciente brecha social entre pobres y ricos, que el Gobierno se ha esforzado en reducir, de momento sin resultados tangibles.