Otros países de Europa Central tardarán todavía más en cerrar la brecha con los 28, según muestran los cálculos del doctor en Economía Drago Pupavac, de la Universidad de Rijeka, y la también doctora Danica Drakulic, de la Universidad Novi Sad. Así, Macedonia igualará el estándar en 135 años, Bosnia en 157 y Albania en 148.
Uno de los objetivos que se plantearon los economistas fue poner a prueba la teoría de la convergencia, que afirma que los países menos desarrollados tienden a crecer más rápido.
Lo que en realidad descubrieron es que el crecimiento económico en los Balcanes se ha ralentizado significativamente debido a las guerras, la inestabilidad política y el período de transición aún no superado.
A pesar de sus esclarecedoras conclusiones, los investigadores estiman que, gracias a una política económica más eficiente, los países de la región podrían ser capaces de incrementar su PIB anual en un 5 o 6% y, de esa manera, alcanzar a sus vecinos occidentales en 14 años, en el caso de Croacia, o dentro de entre 23 y 28 años, en el de Serbia.
"Aunque no podemos pronosticar la convergencia con la UE hasta 2020 de cada uno de los países balcánicos en particular, sus políticas económicas deben apuntar hacia una alta tasa de crecimiento nacional para crear las condiciones propicias", analizaron los expertos.
"Para la convergencia es esencial el desarrollo del capital humano y de las instituciones, además de un ambiente que fomente el espíritu empresarial y los conocimientos exhaustivos de la gestión de inversiones y de estructuras de inversión", prosiguieron.
En opinión de los analistas serbios, las bajas tasas de crecimiento son las que están lastrando las economías de estos territorios.
"Se necesitan un intercambio comercial intenso y grandes inversiones para alcanzar un crecimiento significativo. En lugar de la medida actual, que ronda los 1.000 millones de euros (1.100 millones de dólares), lo necesario para lograr un crecimiento del 4% son 2.000 o 3.000 millones de euros", arguyeron Pupavac y Drakulic.
"Independientemente de quiénes estén en el poder, la economía es así y la matemática es implacable", zanjaron.